¿Qué es el Papanicolaou y cuándo debo realizármelo?

Alrededor del mundo, el cáncer de cuello uterino es una de las principales causantes de muertes femeninas; en México, de acuerdo con la OMS, desde el 2008 este tipo de cáncer es la segunda causa de fallecimientos por cáncer en la mujer, después del de mama.  La buena noticia es que, según datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), la tasa de mortalidad ha disminuido aproximadamente 5% por año en la última década gracias a la prueba de detección y prevención conocida como Papanicolaou.

Durante la prueba se toman células del cuello uterino, la porción final y estrecha del útero; dichas células se analizan para ver si son cancerosas o precancerosas antes de que la enfermedad evolucione, o para brindar atención oportuna en un estadio más fácil de tratar. En ocasiones, las células obtenidas con el Papanicolaou se analizan para buscar virus del papiloma humano (VPH), que pueden provocar cambios en las células precancerosas, por lo que esta prueba reduce significativamente el número de casos y fallecimientos por cáncer de cuello uterino.

¿Yo necesito una prueba de Papanicolaou?

Las mujeres de entre 21 y 65 años de edad se deben hacer la prueba con regularidad; entre los 21 y 29 se recomienda hacerla cada tres años, mientras que entre los 30 y 65 se debe hacer cada cinco años junto con la prueba del VPH. Antes de los 21 años no se recomienda la prueba porque el riesgo de cáncer de cuello uterino es muy bajo a esa edad; además, es probable que los cambios en las células de esa zona desaparezcan solos.

Si estás embarazada, probablemente no se te recomiende una prueba de Papanicolaou, pues si bien no hay riesgos de perforación del útero, está desaconsejada.

¿Qué pasa durante la prueba?

El Papanicolaou se puede realizar durante un examen pélvico ginecológico; tras despojarte de tu ropa interior, el doctor te pedirá que te recuestes en la camilla y subas los pies, posteriormente examinará la vulva, vagina y recogerá células del cuello uterino con un cepillo suave o una espátula plástica. Es un procedimiento sencillo e indoloro, únicamente se siente un poco de incomodidad.

Preparación previa al Papanicolaou

• Debes acudir en días en que no tengas el período menstrual, puede ser unos cinco días después del último día de sangrado.
• No haber usado tampones, espumas o duchas vaginales, ni tenido relaciones sexuales 3 días antes.
• De preferencia, no bañarte antes del procedimiento.

Los resultados del Papanicolaou mostrarán si las células de tu cuello uterino son normales o anormales; con base en la prueba, tu médico te recomendará el tratamiento más adecuado para tu salud.

Ante cualquier síntoma fuera de lo normal, consulta a tu médico. Si necesitas más información, ponte en contacto con Abortar en México.

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