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Las pastillas abortivas son el método más cómodo, eficaz y económico que existe en la actualidad para realizar una Interrupción legal del embarazo (ILE) hasta alrededor de la séptima semana de gestación, periodo en el que tiene una efectividad de casi el 100 por ciento.
Se trata de dos fármacos cuyo ingrediente activo es, por un lado, la Mifepristona (Zacafemyl) y, por el otro, el misoprostol, los cuales tienen efectos abortivos al inducir el desprendimiento del saco gestacional y dilatar el útero, y ocasionar contracciones, respectivamente.
Aunque es un método muy seguro y fácil de efectuar, lo mejor es que su administración se realice bajo control médico especializado, pues así se evitan complicaciones de salud y se puede tener certeza de que el aborto se ha realizado con éxito.
Los pasos que se siguen en una clínica ILE certificada para llevar a cabo este procedimiento son:
La sensación que se produce al interrumpir el embarazo por medio de fármacos es muy similar a la que sucede en un aborto espontáneo, cuyos malestares principales son:
Lo recomendable es reposar por algunas semanas para dar oportunidad de recuperación al cuerpo, evitando actividad física intensa y tener relaciones sexuales. Entre los cuidados más comunes que deben tenerse para reducir dolores, molestias y riesgos de salud, se encuentran los siguientes:
Aunque las pastillas abortivas en México se encuentran reguladas por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) para asegurar su efectividad y descartar peligros graves, existen casos en que los medicamentos están dañados o caducados, la administración pudo haber sido inadecuada o simplemente no fueron bien recibidos por el organismo de la paciente, por lo que podrían presentarse algunos de estos síntomas:
En cualquiera de los escenarios anteriores se debe acudir al médico inmediatamente para que pueda hacer una evaluación acertada del estado de salud de la paciente.
Las preparaciones anteriores al procedimiento no son muchas, basta con acudir a una cita de evaluación, haber hecho ayuno de ocho horas y no consumir ningún tipo de droga o bebida alcohólica mientras se está bajo el tratamiento, sin embargo, existen algunas contraindicaciones que podrían ser detectadas por el especialista, tales como:
Al contrario de otros procedimientos como la aspiración manual endouterina (AMEU) y el legrado, el tratamiento con fármacos no es para nada invasivo y puede practicarse en la comodidad del hogar y en presencia de un ser querido que pueda brindar el apoyo emocional y los cuidados que requieren una situación como esta, lo que lo hace una solución más atractiva en lugar de tener que pasar por esto en una sala de hospital.
Aunque este fármaco es relativamente fácil de conseguir en varios sitios de internet y grupos de mensajería instantánea en donde se vende clandestinamente, su administración requiere de supervisión médica, por lo que su uso sin las precauciones necesarias puede no interrumpir el embarazo y acarrear complicaciones de salud para el feto y para ti misma, poniendo incluso tu vida en peligro.
Entre los principales riesgos del Misoprostol (Cytotec) estas pastillas cuando no son recetadas por un especialista se encuentran las hemorragias, dolores intensos, desmayos y no conseguir el aborto.
Debido a esto, lo mejor es acudir a una clínica ILE certificada, en donde podrán atenderte brindándote seguridad y a un costo bastante similar al que podrían venderte este medicamento de manera ilegal.
El costo de un tratamiento como este varía según la clínica en donde se realice, pudiendo incluso ser gratis en varios centros de salud pública dentro de la Ciudad de México, aunque en este caso la espera para acceder al procedimiento suele ser mayor y la atención no es de la misma calidad que en una clínica particular, en donde puede encontrarse este servicio desde los mil 500 pesos.
Si tienes dudas al respecto y no sabes a quien recurrir, en Abortar en México podemos orientarte. Acércate con nosotros y permítenos acompañarte en este proceso.